La semana pasada, la joven periodista norteamericana Bre Payton -de 26 años-, conocida por trabajar como comentarista y redactora de The Federalist, fue hallada “inconsciente y apenas respirando”. Un día después, el 28 de diciembre, falleció.
Según el Daily Mail, la causa de su fuerte fue la gripe H1N1 y meningitis, tras realizársele una tomografía computarizada, además de otras pruebas. Este tipo de influenza tiene síntomas similares a la gripe común y se extienden por una semana aproximadamente, y puede ser letal si no se toman los resguardos, como vacunas.
Payton había trabajado en distintos medios de comunicación, como Fox News, Fox Business Channel y One America News Network, habiéndose convertido en una activista contra las vacunas, las que precisamente le habrían salvado la vida y a las que es muy fácil acceder en Estados Unidos.
En 2011, la periodista de extrema derecha se refirió en redes sociales al tema, afirmando que “las vacunas son del demonio”, en referencia a una vacuna contra la tos ferina. Pocas semanas atrás se había manifestado contraria a que la atención médica asequible “es un derecho humano”.