
La decisión del Mandatario se da tras la aparición de una investigación en la que se detectó que, anualmente, el Fisco gasta hasta $1200 millones en costear la permanencia de esta figura religiosa, la cual, en algunos casos, tienen rango militar de general.
Al respecto, la vocera explicó que “encontramos que no corresponde este tipo de privilegios y, por eso, el Presidente, Sebastián Piñera ha instruido al Ministro de Defensa y también al Ministro del Interior para que puedan revertir esta acción que hoy día tienen como privilegio los capellanes de las FF.AA. y de Orden”.
La Ministra, Cecilia Pérez explicó que “es un protocolo del Siglo XX. Claramente, por transparencia, por los costos que significan, no corresponden que estos sigan manteniéndose. Es un privilegio que va adicionado al nombramiento del capellán, que dice relación con sueldos y asignaciones equivalentes al grado de general”.