Durante una ceremonia católica celebrada en La Moneda, como parte de la “Misión Fátima Chile” en que una escultura de la virgen llegó hasta el palacio de Gobierno, el presidente Sebastián Piñera pidió a la figura religiosa que “pacifique el corazón de los violentos”.
El mandatario, quien se ha declarado católico en oportunidades pasadas, expresó que “yo le quiero pedir a la virgen que su visita nos ayude a unir a los chilenos. Que tranquilice y apacigüe el corazón de los violentos, que inspire y fortalezca el espíritu de los hombres y mujeres de buena voluntad, porque a Chile nos hace falta visitas como la de la virgen de Fátima”.
La escultura de la virgen de Fátima, cuyo santuario se encuentra en Portugal, llegó el 16 de septiembre a Chile para una peregrinación que se prolongará hasta el 20 de mayo de 2020.
El recorrido del tour religioso se puede revisar en el sitio oficial de la gira, que pasará por Santiago, Rancagua, Talca, Los Ángeles, Temuco y Valparaíso, entre otras ciudades.