Las disputas históricas entre países a veces van más allá de dónde están los límites geográficos o qué se reconoce como propio en los organismos internacionales, a veces también llegan a lo culinario. Es así como la discrepancia sobre si el pisco es chileno o peruano tiene décadas de historia incluso en tribunales internacionales, y ahora se suma un producto característico en el desayuno nacional: la marraqueta, y a Bolivia como parte interesada.
Esto luego que el embajador de Bolivia ante las Naciones Unidas, Sacha Llorenti se percatara que al buscar la palabra en el diccionario de la Real Academia Española (RAE), solo aparecen como productores de dicho pan, Chile y Perú, y nada de su país natal, que también produce un pan crujiente llamado marraqueta.
Llorenti no se quedó de brazos cruzados y tomó la iniciativa, enviando una carta a la RAE para que se considere a Bolivia como productora de marraqueta.
“El motivo de esta carta es que tengan a bien incluir a Bolivias en el apartado en el que el diccionario se refiere a la marraqueta (…) Sé que les resultará muy sencillo hacerlo. Sé también que su inclusión hará nuestra marraqueta ni más ni menos crujiente, pero creo que será un reconocimiento para los cientos de miles de personas para quienes el pan nuestro de cada día es, precisamente, una marraqueta”, dice el representante altiplánico en una misiva llena de elogios al crujiente pan.
La carta, que fue publicada por el propio embajador en su cuenta de Twitter asegura también que “la marraqueta es parte de nuestra identidad“, como casi uno de los últimos argumentos para incluir a este tipo de pan en el diccionario como parte de la cocina y cultura boliviana.
He enviado una carta a @RAEinforma, solicitando que incluya a Bolivia en el diccionario cuando se refiere a la Marraqueta. La carta se explica por sí misma. #marraquetaboliviana pic.twitter.com/izSAZf8MPJ
— Sacha Llorenti (@SachaLlorenti) 15 de mayo de 2019
La información es de TELETRECE