Según una reciente investigación de la Agencia de Protección Ambiental en EEUU (EPA), el uso de sartenes o cacerolas con revestimientos antiadherentes dañados puede llevar a ingerir sustancias tóxicas, como el ácido perfluorooctanoico (PFOA).Al filtrarse en el agua, el PFOA entra en la cadena trófica, amenazando la salud de la gente. Las partículas del ácido pueden causar el desarrollo de cáncer, el incremento de los niveles de colesterol y la debilitación del sistema inmunológico.
Los ensayos con animales de laboratorio también señalaron que el PFOA acelera la génesis de tumores hepáticos, pancreáticos y de órganos genitales. Además, puede llevar a la infertilidad.
La integrante de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Joan McBride, subraya el peligro se PFOA: “estos productos químicos se llaman persistentes. Se quedan contigo, son insidiosos”.
Los estudios anteriores de EPA confirmaron que el PFOA es utilizado en un tercio de todos los envases de alimentos en EEUU. Esta sustancia también está presente en materiales impermeables e ignífugos, incluso en la ropa y los tapices con resistencia a manchas. Los fabricantes alegan que esta sustancia pospone la fecha de caducidad de los productos y aumenta su calidad y seguridad sanitaria.
Según el administrador de EPA, Scott Pruitt, la Agencia ahora está elaborando las recomendaciones para el saneamiento del agua potable y así eliminar el PFOA y otros productos químicos tóxicos.