Publican testimonio que revela cómo la dictadura arrojaba personas vivas al mar

Ceferino del Carmen Santis Quijada, Luis Fernando Norambuena Fernandois y Gustavo Manuel Farías Vargas. Todos ellos fueron detenidos por militares del Regimiento de Ingenieros de Tejas Verdes de San Antonio.

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Helicópteros Puma Ejercito De Chile 1973

SANTIAGO (SputniK) — La violación de derechos humanos ejercida por la dictadura de Chile (1973-1990) incluyó procedimientos en los que lanzaban personas vivas al mar desde helicópteros, reveló el diario digital El Dínamo.

El medio digital publicó un testimonio que Orellana dio a la justicia en mayo de 2012, en el cual dijo que tres detenidos desaparecidos durante la dictadura chilena habían sido arrojados vivos desde un helicóptero al Océano Pacífico.

Orellana ejercía como mecánico de los helicópteros militares durante la dictadura y formó parte del vuelo en que Ceferino Santis, Luis Norambuena y Gustavo Farías fueron empujados vivos al mar en octubre de 1973.

“El capitán empujó hacia abajo a uno de los sujetos y este apoyó los pies en el carenaje del tren de aterrizaje, se produjo una lucha, un forcejeo y, visto esto, lo vuelve a tirar de las axilas, lo despega del tren de aterrizaje y lo lanza hacia el mar”, detalló Orellana.

El militar en retiro relató que la situación comenzó cuando las víctimas fueron trasladadas en una camioneta desde un centro de detención hasta el aeródromo de Tobalaba en Santiago, donde se encontraba estacionado el helicóptero.

“Al subir a la aeronave me encontré en el piso con tres personas vivas, que estaban atadas de pies y manos y con la vista vendada”, dijo Orellana.
En agosto de 2014, Orellana volvió a realizar otra declaración a la justicia y agregó que “las personas iban amarradas, con los ojos vendados y con un pedazo de fierro amarrado a los pies, y nunca escuché sus voces”. 

El exmecánico relató que los oficiales a cargo advirtieron antes de despegar que si no aceptaban la misión, los tomarían prisioneros y los fusilarían por “traidores a la patria”.

Lanzamientos

Orellana afirmó que todos los tripulantes aceptaron la misión y despegaron rumbo a la costa chilena, cerca de la localidad de Santo Domingo (centro), y relató cómo uno de los exagentes a cargo arrojó a las víctimas al mar.

“El capitán tomó a la persona más adulta de los pies, lo giró hacia la puerta y lo empujó con las manos hacia abajo, hacia el mar”, señaló.
Por las características, se cree que la víctima se trataría de Ceferino Santis, un obrero y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionario que estaba casado y tenía dos hijos.

“Al segundo sujeto lo tomó de las axilas, lo llevó hacia la puerta y lo tomó de los pies, empujándolo de la misma manera que al primero”, dijo, refiriéndose probablemente a Luis Norambuena, secretario regional de la Central Unitaria de Trabajadores.

El tercer sujeto, el que luchó para no caer, fue probablemente Gustavo Farías, un militante del Movimiento de Izquierda Revolucionario y el más joven de las tres víctimas.

Por último, señaló que la identidad de los exagentes a cargo “serían probablemente”: el mayor Emilio de la Mahotiere, el capitán Richter Nuche Sepúlveda y el exagente Miguel Krashnov.

Debido a este testimonio, estos tres exagentes fueron procesados el 9 de mayo pasado por estos crímenes, según relató El Dínamo.

Esta forma de exterminio llamada Vuelo de la Muerte se realizaba durante el régimen de Augusto Pinochet y también en otras dictaduras latinoamericanas, con el objetivo de hacer desaparecer los cuerpos de las víctimas.

En Chile, el régimen de Pinochet utilizaba el término clave “operación retiro de televisores” para referirse a esta práctica.