Este sábado 02 de abril a las 23:59 horas comienza a regir el llamado “Horario de inverno”, concretamente se atrasan los relojes una hora.
Con este cambio la noche llega antes y el día se hace corto, lo que podría generar algunas alteraciones del sueño,de la alimentación y de los estados de ánimo, tanto en adultos, pero especialmente en niños, considerando además los cambios de rutina por retomar la presencialidad en las escuelas y jardines infantiles.
En este contexto, Verónica Cubillos, jefa de carrera de Educación Especial del Instituto Profesional Santo Tomás sede San Joaquín, nos entrega algunas recomendaciones para preparar a los niños en este cambio de hora:
- Explicar al niño sobre los cambios que se vienen con este nuevo horario. Por ejemplo, la llegada del otoño, la caída de las hojas de los árboles, la disminución de la temperatura y de la luz solar. Por ejemplo, puede ser leyendo un cuento sobre el otoño.
- Una forma concreta de ayudarlos a entender el cambio es que, junto a ellos, puedan cambiar las horas del reloj de la casa.
- Revisar y reconfigurar las rutinas de sueño y alimentación. Podrían empezar adelantando las comidas, pues la hora “del hambre” se puede anticipar.
- Durante los primeros días pueden dormir una siesta si lo requieren de acuerdo a su rutina de sueño. Si se despiertan temprano para ir al colegio o jardín, tal vez llegarán cansados.
- Para activarlos al despertar podemos encender las luces del dormitorio y poner una música que les agrade y les estimule.
Todo cambio conlleva ajustes y dificultades, pero siempre son una oportunidad para dialogar con los niños y niñas de lo que sucede en nuestro entorno y cómo podemos con una actitud positiva sortear las dificultades.