Respaldado por 21 votos a favor y una abstención, el Senado dio curso al proyecto de acuerdo por medio del cual se solicitara al Presidente de la República Sebastian Piñera realizar todas las gestiones políticas, diplomáticas y judiciales necesarias para obtener la pronta extradición al país de Pedro Barrientos Núñez, desde Estados Unidos, para restablecer el imperio de la justicia y de los derechos humanos.Entre los promotores del acuerdo están los senadores Álvaro Elizalde, Isabel Allende, Carolina Goic, Adriana Muñoz, Ximena Órdenes, Yasna Provoste, Ximena Rincón, Pedro Araya, Alfonso De Urresti, Guido Girardi, Alejandro Guillier, Francisco Huenchumilla, José Miguel Insulza, Ricardo Lagos Weber, Juan Ignacio Latorre, Juan Pablo Letelier, Carlos Montes, Alejandro Navarro, Jorge Pizarro, Jaime Quintana, Rabindranath Quinteros y Jorge Soria.
Todos ellos manifestaron “públicamente el repudio de este Senado al asesinato de Víctor Jara así como a todas las violaciones a los Derechos Humanos cometidas durante el período de la dictadura cívico-militar, reafirmando nuestro firme compromiso con el respeto a los derechos fundamentales de todas las personas sin excepción ni condicionamiento” y dejaron constancia de su “absoluta claridad de que la separación de los poderes del Estado es también otro pilar fundamental de nuestro sistema republicano”, por lo que instaron al gobierno a tomar medidas.
En el texto aprobado se precisa que “en julio pasado el Ministro en Visita de la Corte de Apelaciones de Santiago, Miguel Vázquez, condenó a ocho ex efectivos del Ejército en calidad de autores, y uno en calidad de encubridor, por el asesinato de Víctor Jara. Sin embargo, uno de los homicidas, Pedro Barrientos Núñez, no ha podido ser sentenciado por encontrarse en rebeldía y residiendo actualmente en Estado Unidos”.
Asimismo, del proyecto de acuerdo se desprende que los autores manifiestan “nuestra más absoluta condena al asesinato de Víctor Jara, un destacado creador, artista y referente cultural que ha situado en lo más alto el nombre de Chile. El respeto a los Derechos Humanos es universal y no admite excepciones”.
“La vida humana y la dignidad del ser humano constituyen valores fundamentales de nuestra sociedad y este predicamento no admite ninguna clase de relativización ni contexto que justifique las violaciones a los Derechos Humanos”, se insiste.
