Asimismo, indican que los resultados de un modelo desarrollado por Espacio Público “permite evaluar cuánto se requiere incrementar el número de exámenes PCR para que la positividad baje a niveles razonables”.
Los autores aseguran que “se detectaría más del doble de contagios si se contara con suficientes tests para alcanzar una positividad inferior al 15%; aun triplicando la capacidad de testeo, la positividad estará lejos del 5%”.
En la misma línea, agregan que “que “habrá que agregar estrategias para mejorar la trazabilidad y reducir el número de contagios”, junto a “lograr niveles de acatamiento de las cuarentenas mucho mayores”.
Sobre el Gran Valparaíso, señalaron se observa “una moderación en la tasa de crecimiento de nuevos casos, estos siguen subiendo, con excepción de Quilpué”. No obstante, aclaran respecto a un “explosivo crecimiento” en Los Andes, San Felipe y Santa María.
Con respecto a la capital, afirman que sigue “siendo fuente de noticias preocupantes para los autores”, debido a que “la tasa de crecimiento en vez de bajar y volverse negativa, ha subido a 17%”.
Ante este escenario, los autores reiteran que es necesario “reducir franca y decididamente la movilidad en la ciudad”.
Sobre este mismo punto, complementan que “la ciudad y su sistema hospitalario no aguantan otro mes con estos niveles de contagios (…) el gran Santiago debe entrar en hibernación, sí, como una ciudad dormida”.
Proponen “medidas de mayor confinamiento, tal vez una ampliación del toque de queda, restringir al máximo el acceso al transporte público, una fiscalización muchísimo más estricta y una reducción de los permisos”.
También se precisa que “con las cifras actuales, se ha alcanzado un nuevo peak en los promedios móviles de nuevos casos (5.799) y de positividad a nivel nacional (31.4%).
Asimismo, los fallecimientos reportados durante la última semana ascendieron a 1.098, con un promedio de 157 decesos informados cada día.
Los autores reiteran su llamado al Gobierno “a reaccionar con firmeza, pidiendo a la población su máximo sacrificio y solidaridad para evitar una debacle”. Con este fin, sentencian que es “fundamental la participación de la sociedad civil en campañas para concientizar a la ciudadanía”.